Una torta clásica, la chiffon cake, creo que no pasa de moda porque es super ligera, suave como la seda y deliciosa.

Tenemos que contar con un molde para torta chiffon, que es la base desmontable y el centro es sobresale del molde. Es liso. Aunque yo desafié la tradición y lo hice en este molde acanalado y de teflon.

El molde debe estar totalmente limpio, no hay que engrasarlo para nada, porque la torta va subiendo a medida que crece, y se tiene que ir adhiriendo al molde para que no se baje.


Batimos 4 yemas ( 72 gr ) con 70 gr de azucar hasta que este bien espumosa y de color amarillo muy clarito. Luego le agregamos 50 gr de aceite neutro, de maiz o girasol


Tamizamos
120 gr de harina comun con 1 y 1/2 cdita de polvo para hornear o Royal

Por otro lado tenemos
100 cc de leche ( media taza)

Vamos intercalando al batido de yemas, el harina y la leche, una vez cada uno, un poco de leche, otro de harina... ( en 3 veces, terminar con harina). Mezclar sin batir para no bajar el batido.



Aparte batimos las 4 claras ( 126 gr) con una pizca de cremor tartaro, y 85 gr de azucar blanca hasta que haga picos.


vamos mezclando ambas preparaciones muy suavemente



la colocamos en el molde, y limpiamos bien el molde de restos que nos hayan quedado, con una servilleta de papel.


Llevamos a horno 175ºC durante 40 minutos.

Esto es importante! apenas salga del horno, ponemos el molde boca abajo sobre una rejilla, o sobre 2 cucharas o palos largos, para que tenga aire y salga el vapor.

cae solita despues....


Miren lo que me paso con la anterior por hablar por telefono y no dejarla boca abajo...

quedo graciosa, pero por dentro estaba apelmazada!!!! Así que tuve que hacer otra que es la que les muestro al principio, ni decorar me dejaron, se la devoraron en caliente




Esta receta pertenece al blog http://lacocinadeile-nuestrasrecetas.blogspot.com